Llega la última carrera del año, en Brasil, país de la samba, de Copacabana, de las caipirinhas... Un país donde Briatore podría lucir su prenda de ropa favorita sin que haga sentir incómodo a los que lo vean luciendo palmito, o igual resulta menos desagradable.
También es un fin de semana de muchas despedidas: Webber, todo un "ONVRE" de calzoncillo Abanderado y camiseta Imprerio, de Red Bull, Massa de Ferrari (mi más sentido pésame a los seguidores de Williams ante la llegada de este piloto a su equipo), la despedida de los millones revolusionarios del equipo Williams ante la marcha de Maldonado, lo que me parece una buena noticia para Williams, pero malísima para la F1 si para el año pilota para Lotus cerrándole la puerta a Hulkenberg, los motores V8 para dejar paso a los V6 Turbo limitados a 15.000 rpm, que regalarán muchas barbacoas al aficionado, y algunas otras despedidas que ahora mismo no recuerdo o se producirán en los próximos días. Lo malo es que en esas no estará alguna que muchos deseamos. Si sois lectores habituales ya sabéis a quien me refiero...
El mundial acabará en uno de los pocos circuitos que forman parte del calendario que no tienen nada que ver con las idas de ollas del arquitecto oficial de la FIA. Interlagos es un circuito con desniveles, una zona de velocidad pura que empieza desde la curva Junçao (no confundir con cierta pit reporter (?) de cierto canal), en el tercer sector, pasando por la famosa Ese de Senna, curva cuya escapatoria han asfaltado provocando un bonito destrozo, amén de no penalizar los errores de los pilotos, para finalizar en la curva Descido do Lago. Seguirá una recta hasta la curva Ferradura donde comenzará una secuencia de curvas enlazadas hasta llegar a Junçao.
Los favoritos vuelven a ser, guste o no, los Red Bull. Han sido de largo el mejor equipo del año y buscarán acabar la temporada ganando y, como no, buscando un doblete, quizás en el orden habitual, quizás en el orden Multi21, dejando que Webber gane en la que sería su última carrera en la F1 antes de pasarse al WEC con Porsche. Pero es muy bonito eso de dejarle ganar, pero también tendrá que demostrar que merece ganar una carrera y que puede hacerlo por si mismo, cosa que estando Vettel no veo nada factible, salvo que el alemán decida apartarse cual Senna en Suzuka 1991 dejando pasar a Berger, además de olvidar que Webber no le ayudó en la edición de 2012 cuando estaba el título en juego. En cuanto a los demás competidores, las principales alternativas están en Mercedes y Lotus, y Ferrari a saber con que nos sorprenden y si deciden cerrar la temporada quedando los dos coches fuera de la Q3.
Para esta carrera, Pirelli llevará la gama más dura de sus compuestos: duros y medios, de forma que en ningún fin de semana del campeonato se ha dado la combinación duros y blandos, por mucho que cierto speaker haya dicho durante toda la temporada duros y blandos, causando confusión a la gente por no llamar a las cosas por su nombre. En cuanto al DRS habrá dos zonas, la primera de ellas en la Reta Oposta, a la salida de la curva 3, con la zona de detección en medio de las Eses de Senna (curva 2), y la segunda estará en la recta de meta con la detección situada a la salida de la curva 13.
Y mis últimas apuestas son pole de Vettel y victoria de Vettel, que tiene posibilidades de igual un par de records y el chaval no parece querer dejar nada a nadie.
Más información del Gran Premio de Brasil, así como sus horarios, la tenéis a vuestra disposición en nuestra página Próximo GP.
