Repasando las fechas del calendario, a estas alturas de mundial, se podría decir, bajo mi punto de vista, que quedan dos circuitos, dos truños, una confirmación de truño y una incógnita. De todos esos seis que suman en total, hablaré de uno solo, no diré en que categoría lo incluyo pero si tenéis la costumbre de leerme, podréis ubicarlo sin ningún problema, a éste y a los cinco restantes.
Dejando de lado las formas del circuito, esta cita puede darnos a un nuevo bicampeón del mundo. Posibilidades, haberlas haylas como las meigas, otra cosa es que salgamos de Singapur con el título sentenciado matemáticamente. Vettel no depende de si mismo para lograr la corona, tendría que ganar y que Alonso no se suba al podio y que ni Webber ni Button queden segundos. Como la carrera será, salvo sorpresa, para el alemán, lo más interesante estará en saber quien completa el podio y las posiciones del mismo. Hamilton, quinto del mundial, será el piloto que pueda hacer que Vettel se lleve el mundial este domingo. Un segundo puesto del inglés y un tercero del segundo McLaren o del segundo Red Bull, sumado a la victoria de Vettel, harán que el mundial de pilotos ya esté acabado de forma matemática. Puede parecer una combinación algo complicada pero perfectamente factible. Para todo esto Pirelli llevará los compuestos blando y superblando, decisión comprensible y lógica cuando se trata de un trazado urbano y se corre de noche.
Más información del Gran Premio de Singapur, así como sus horarios, en especial los del sábado, la tenéis en nuestra página Próximo Gran Premio. Que la noche singapureña, o como se diga, no os de sueño.
Imagen Daylife
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