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Una nueva religión

El otro día leyendo uno de los posts del blog de J. Arce, concretamente en el apartado de los comentarios, llegué al blog titulado El Cuentakilómetros, cuya última entrada en ese momento estaba dedicada a la forma de entender la F1 en España según cierto gurú informativo. Bueno, se podría decir que es más una religión que una forma de entender. 

Básicamente, esta religión se puede reducir a una serie de mandamientos que deben ser seguidos a rajatabla si comulgas con el citado periodista. Dichos mandamientos son 13 y no 10, como los bíblicos:
1.  Si un piloto se sale bajo la lluvia es porque no es frío y no sabe pilotar con agua, pero si es Fernando Alonso el que se sale en mojado es porque es el más valiente, que ha ido buscando los límites.
2.  Fernando Alonso no adelanta, hace el adelantamiento del siglo.
3.  Si Fernando Alonso hace la pole es porque VUELA, si la hace cualquier otro piloto es porque va sin gasolina.
4.  Fernando Alonso no choca, tiene problemas de dirección.
5.  Fernando Alonso no pincha, alguien pierde una pieza que le hace pinchar.
6.  Fernando Alonso no se sale, le echan.
7.  Nadie adelanta a Fernando Alonso, es él quien se deja pasar por estrategia.
8.  Lewis Hamilton ganaba a Fernando Alonso porque Ron Dennis lo ordenaba.
9.  Las telemetrias de Alonso son tan buenas que dan la victoria a cualquier piloto, menos a él.
10.  Si hay problemas con Alonso en boxes, es que porque en su equipo quieren chafarle el campeonato; si los problemas los tienen otros, es que Alonso los puso nerviosos con sus tiempos.
11.  Si Alonso ganaba con el Renault, es porque es muy bueno; si pierde, es porque el coche es el peor coche de la parrilla, al igual que el equipo, que no apoya nada a Alonso y se guardan el mejor coche para el otro piloto.
12.  La lluvia a mitad de la carrera sólo perjudica a Alonso y la estrategia de su equipo; los demás pilotos corren con paraguas.
13.  En 2006, Ferrari era el equivalente automovilístico del Eje del mal, conspirando continuamente con la FIA contra Alonso. Luego ficharon a Alonso y la situación se invirtió, ahora son los más perjudicados.
Como bien apunta el autor, estos mandamientos se reducen, en esencia, a dos que se podrían englobar en uno: 'Amarás a Alonso como único Dios verdadero y odiarás a Hamilton sobre todas las cosas'. Aunque bueno, también se podría incluir algún que otro anexo a este mandamiento, como, por ejemplo, 'Odiarás el dedo de Vettel' o 'Arremeterás contra el compañero de equipo si rueda por delante o si intenta adelantar a Alonso'. Dichos mandamientos corresponden a la religión del Alonsismo militante, mandamientos que el profeta Lobato entregó al pueblo en su afán de hacer llegar la mencionada fe a todos los rincones de España.

Me imagino que ya os habréis dado cuenta de que Lobato no es para nada santo de mi devoción, su forma de ver la Fórmula 1 es demasiado parcial, con mucho desprecio a lo que no rodea la figura de su amor platónico y con un gran desconocimiento del mundillo en el que está metido, por no hablar de su gran incapacidad de leer las carreras, suerte que tiene a su lado a De la Rosa y a Gené para meterle algún que otro corte durante la retransmisión, además de Jacobo Vega. Lo único que, bajo mi punto de vista, hace bien es saber transmitir emoción durante la carrera, aunque alguna vez sea porque está teniendo un orgasmo en directo. 

Si todavía no te has convertido a esa religión, no esperes en hacerlo. Es más, ni siquiera es necesario bautizarse ni nada, solo tienes que poner a Alonso en lo más alto y, como no, cumplir los mandamientos tal y como están escritos. En lo que a ceremonia religiosa se refiere, estas suelen ser los fines de semana en los que haya carrera, celebrándose un total de tres oficios por carrera, dos los sábados y uno los domingos, a los que hay que sumar las epístolas del profeta Lobato durante los informativos. No lo dudes y conviértete.

PD. Doy las gracias a dondedigodigo, autor del blog El Cuentakilómetros por permitirme colgar estos mandamientos, y a Arquio, autor de las nuevas tablas de la ley.

2 comentarios, ¡anímate a comentar!

Anónimo dijo...

Soy José Luis, Pulguitaatodogas, con problemas de conexión.
Comentando este tema, varias personas coincidimos en que en su día la 5 y su comentarista fue un factor importante de la marea azul; pero se pasó y ahora es posible que le perjudique: sus comentarios son al espectador imparcial, como el dedo de Vettel.


Dani dijo...

José Luis, y claro que tuvo un efecto en la recepción de la F1, pero muy sesgado y no me extraña que caiga cada vez peor. El se lo guisa, el se lo come.


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